J. Fabien Mérelle
"L’arbre au corps"
«Apasionado del realismo, preocupado por los detalles sin fondo y meticuloso hasta el extremo, había perdido el hilo del dibujo al azar. Ese que se hacía simplemente para pasar el tiempo, para satisfacer una pulsión. Ese que decía en unos pocos trazos de rotulador lo que a nuestros seis años nos costaba decir con palabras. Intenté retomarlo sin contaminar el trazado interrumpido por el tiempo y la buena voluntad del niño que fui. Quería que se mezclaran las voces y escrituras, graves y agudas, ligeras o pesadas. Buscaba en esas reliquias abigarradas vacíos elocuentes y encontraba silencios ávidos de preguntas. No buscaba una confrontación, sino un paso hacia adelante o hacia atrás. Utilizar un bolígrafo falsamente infantil habría sido igualmente estéril. Soñaba con un ir y venir, con una conversación desdibujada. Volver a pensar en la infancia fue como abrir la caja de Pandora de los temores y los miedos primarios, sumergir la cabeza en una mitología forjada en la oscuridad de una habitación al ir a acostarse. Mitología que he estado muy tentado de enterrar bajo el pelo y la máscara de la pubertad y del resto. Sin embargo, en lugar de desaparecer, vino a habitar mis dibujos, teatro de conflictos y de anhelos, sin bridas y, ahora, la realidad domesticada». Fabien Mérelle
El personaje que aparece vestido con un pijama en sus obras es el propio artista, describiendo situaciones personales, que a él le gusta narrar mediante enigmas; los fragmentos de una historia familiar, de una narrativa íntima, que también es la nuestra. Este vacío omnipresente se convierte en un espacio dejado para que el espectador de rienda suelta a su imaginación y a su propia historia.
Cuando el dibujo de Fabien Mérelle adopta la forma de una escultura, es para expresar un vínculo, como los fragmentos de abrazos que presentó en 2017 en Hong Kong, testimonio delicado de un momento compartido con su padre. En sus obras se observa cómo la fragilidad se codea con la fuerza, siempre en una dimensión humana.
REFERENCIAS BIOGRÁFICAS
Fabien Mérelle nació en 1981 en Fontenoy-aux-Roses. En la actualidad, vive y trabaja en Tours y en París. En 2005, recibió una beca para estudiar en la Academia de Bellas Artes de Xi’an, China. Ya apasionado por el arte del dibujo, gracias a ese viaje pudo profundizar en las técnicas de la tinta china.
En 2006 se graduó en la Escuela de Bellas Artes de París. En 2007 fue miembro de la Casa Velázquez de Madrid, donde permanecería durante un año. En 2008 hizo su primera exposición individual en la Galerie Premier Regard. En 2010 fue el ganador del premio Canson. En 2012, su obra pasó a formar parte de las colecciones de Beaubourg gracias a la donación de Guerlain.
Sus obras, dibujadas con tinta china y acuarela, encuentran su sentido e inspiración en una puesta en escena a la vez cruel, irónica y dulce de su vida cotidiana y de su entorno. Sus dibujos son las tribulaciones de un solo y mismo personaje, siempre vestido burdamente con un pijama de rayas azules y una camiseta blanca.
Fabien Mérelle proyecta su cuerpo en este universo, donde todo se mezcla: animal, vegetal y mineral. Donde la corteza corta la piel y donde el hombre se asemeja a los animales. Un mundo en el que ya no existen las leyes de la gravedad, ni los buenos modales ni los tabúes. Fabien dibuja sobre ese espacio blanco del papel, que está muy presente. De esos decorados vacíos surgen escenas detalladas, la hoja como receptáculo de los pensamientos, de los anhelos y de las angustias del autor. Dibujar de manera realista lo improbable es el reverso del decorado, una realidad diferente, en la que se entremezclan mitos griegos y creencias ancestrales.
Su dibujo sigue su vida y nos habla de la condición de un hombre que ama, que tiene miedo y que se convierte en padre. Él se alimenta de todo: de las obras de los artistas a los que admira, de las imágenes que recolecta al azar y de las palabras que le obsesionan. Son los «haikus» dibujados, una existencia gráfica.
Su trabajo ha viajado mucho. En 2012 viajó a Hong Kong, donde presentó en Statue Square una escultura monumental de 5 metros de altura, resultante de uno de sus dibujos. En 2015 expuso en el Drawing Centre de Nueva York. En Melbourne, como parte de una exposición que celebraba los 500 años de La Melancolía de Alberto Durero. En Madrid, Ginebra, Bruselas, Estambul, Yakarta, Seúl, Singapur, Taiwán y Pekín.
Está representado en París por la Galerie Praz Delavallde, en Hong Kong por Édouard Malingen, en Madrid por Michel Soskine, en Ginebra por Wilde Gallery Geneva y en Amberes por Keteleer Gallery.