12. Hortus vitae
El huevo representa la perfección de la naturaleza y su armonía. Es el origen de todo ser viviente y simboliza la fertilidad. Estamos ante un inusual huerto ornamental. Se diferencia claramente de los huertos tradicionales porque las plantas ornamentales se mezclan con plantas productivas, alimentando así el cuerpo y la mente, y creando un jardín «impresionista», un reino de mezclas, lleno de colores y fragancias. En el otro lado del camino que recorre este espacio se extiende un jardín silvestre, diseñado como un prado florido. El huerto ornamental y jardín silvestre son dos aspectos diferentes de la Madre Tierra, que tienen en común la variedad y la mezcla de especies. Son la demostración de una convivencia equilibrada y armoniosa. La elección de las plantas manifiesta más que un interés estético, emana de una visión sostenible y ecológica cuyo objetivo es promover la biodiversidad. La presencia de una pérgola y de animales, junto con el sauce trenzado, sirve de vínculo de unión entre el visitante y el mundo vegetal. Pasear entre ellos se convierte en una experiencia a la vez sensorial, envolvente y educativa, que incita a reconsiderar la relación entre el hombre y la naturaleza, y que abre nuevos horizontes como fuente de un potencial renacimiento.
DISEÑADORES
La multidisciplinariedad caracteriza al equipo de Hortus Vitae, compuesto por dos arquitectas paisajistas, una más especializada en el diseño y la otra en el campo histórico-teórico, una agrónoma paisajista y la otra agrónoma artista. Su proyecto aúna la contribución de cada una, lo cual, como en el caso de las plantas de su jardín, se completa y enriquece con el intercambio mutuo.
Arquitecta paisajista y artista, e hija de químico, Giuliana Gatti siempre se ha sentido atraída por todas las formas de la naturaleza y la expresión artística. Tras una experiencia de algunos años en Berlín como arquitecta paisajista, desde el 2000 dirige su propio estudio. Gatti trabaja en proyectos de diseño del paisaje a diversas escalas, desde jardines residenciales privados hasta parques públicos. También fue profesora adjunta de Arquitectura del Paisaje en el Politécnico de Milán hasta 2015 y ha participado en varios concursos internacionales donde ha recibido varios premios y menciones. Jardines y plantas son una pasión que ella cultiva a través de la observación, las pinturas, la fotografía y los proyectos. Está especialmente interesada en el bosque, que es una fuente continua de inspiración, y en la frontera entre el jardín y el paisaje. En los últimos años, se dedica a pintar y descubre otras formas de expresión.
Arquitecta paisajista y periodista, tras finalizar su doctorado en la Universidad de La Sorbona de París I con una tesis sobre los parques urbanos franceses del Segundo Imperio francés, en la actualidad combina la actividad profesional con la investigación y la enseñanza entre Francia e Italia. Luisa Limido es la autora de contribuciones científicas relativas a la historia y el diseño del paisaje y de jardines, así como del libro L'art des Jardins sous le Second Empire. Jean-Pierre Barillet-Deschamps (1824-1873), Champ Vallon 2002. Su enfoque se basa en la idea de que las formas físicas son la expresión de los valores históricos y socioculturales. Este es el hilo conductor entre su análisis de los parques históricos y contemporáneos, y del diseño de nuevos espacios. En la actualidad, es investigadora asociada en el LAREP (Laboratorio de Investigación en Proyectos del Paisaje, por sus siglas en francés), en la Escuela Nacional del Paisaje de Versalles-Marsella. Desde 2010, escribe regularmente para la revista internacional Topscape Paysage como corresponsal desde Francia.
Giulia Calzetti se graduó en Ciencias Agronómicas y se especializó como arquitecta del paisaje en el Departamento de Arquitectura y Diseño (DAD) de la Universidad de Génova. Desde su infancia se ha sentido atraída por todo lo relacionado con la naturaleza. A través de sus estudios y de la experiencia de su trabajo actual, Calzetti ha creado un vínculo inseparable con la naturaleza y siente una gran pasión por el paisajismo. En su opinión, el arquitecto paisajista desempeña un papel esencial en el futuro de los ambientes construidos y en la relación entre el hombre y la naturaleza para la preservación de los recursos naturales. En la actualidad, trabaja como ingeniera agrónoma y arquitecta paisajista, y colabora con el estudio de Giuliana Gatti.
Siempre fascinada por la belleza de la naturaleza, Anna Patrucco dedica su vida al respeto de la misma y vive con su familia muy cerca del bosque. Se graduó en Ciencias Agronómicas. En el año 2000, fundó Salix, un pequeño centro donde cultiva sauces y experimenta con ellos como material para tejer estructuras y como planta ornamental. A medida que trabaja con sus sauces, le resulta más satisfactorio haber logrado dominar técnicas que han estado en uso durante cientos de años. Comenzó a hacer pequeños cestos y hoy en día utiliza las habilidades adquiridas para crear estructuras ornamentales para jardines. El género Salix está compuesto por alrededor de 300 especies, desde el majestuoso árbol hasta la humilde planta rastrera, y posee una asombrosa variedad de formas y colores.