Esta habitación fue bautizada con este nombre debido a un signo que figura en el manto de la chimenea: la letra griega delta (inicial de Diana) y tres círculos o lunas llenas. Esta escultura se interpretó originalmente como un signo cabalístico de Ruggieri, uno de los astrólogos de la reina Catalina de Médicis, pero podría ser una evocación a Diana de Poitiers, ya que, en la mitología romana, Diana es la diosa de la luna.
Una cama con dosel, de finales del siglo XVII, un retrato supuestamente de Cosimo Ruggieri del siglo XVII, una curiosa silla del siglo XV que evoca, en tres niveles diferentes, la posición jerárquica del señor y de su familia o la posición de los miembros del clero, y un escritorio de tapa abatible con un cajón y cintura con un batiente con cerradura, que data del primer cuarto del siglo XVII, completan la decoración de esta habitación.
Esta estancia tiene una chimenea policromada del siglo XVI que recuerda que antiguamente todas las chimeneas estaban pintadas, y paredes construidas con ladrillo y piedra según un procedimiento muy utilizado a comienzos del siglo XVI.
Cosimo o Côme Ruggieri
Nacido en Florencia, era hijo del médico, astrólogo y adivino Roger el viejo (Ruggiero il vecchio). Catalina de Médici lo llevó a Francia para convertirlo en su confidente y consejero, por lo que ejerció sobre ella una considerable influencia.
A Ruggieri se le atribuyen varias predicciones. Se cuenta que le dijo a Catalina de Médici que sería reina de Francia (a pesar de estar casada con Enrique II, que en ese momento era solo el hermano benjamín del rey regente) y que tendría 10 hijos en una época en la que pensaba que era estéril.
En el Castillo de Chaumont fue donde tuvo lugar una de sus predicciones más famosas: el encuentro entre Ruggieri y Catalina de Médici. Los historiadores no se ponen completamente de acuerdo sobre la sala en la que tuvo lugar esa reunión, pero según Félibien (arquitecto e historiador francés del siglo XVII), esta sala estaba orientada al Loira, por lo que se encontraba o bien en el ala norte, destruida en 1750, o bien en la torre de San Nicolás, que sigue en pie.
Los tres rostros de los hijos de Catalina de Médici habrían aparecido sucesivamente en un espejo, que habría girado tantas vueltas como años de reinado viviría cada uno de los tres reyes: Francisco II (1 vuelta), Carlos IX (14 vueltas) y Enrique III (15 vueltas). Cuando este último falleció en 1589, sin descendencia, la dinastía de los Valois se extinguió a favor de la de los Borbones, con el advenimiento del rey Enrique IV.
También se dice que Cosimo Ruggieri le habría predicho a Catalina de Médici que fallecería “cerca de Saint-Germain”, lo que interrumpió la construcción del Palacio de las Tullerías, situado cerca de la iglesia de Saint-Germain l'Auxerrois, y motivó su precipitada instalación, en 1572, en lo que se convertiría en el Hôtel de la Reine. La reina madre falleció el 5 de enero de 1589 en el castillo de Blois. El confesor que le dio la extremaunción se llamaba Julien de Saint-Germain.
Aunque Ruggieri era un gran especialista en los astros, también conocía otros métodos mágicos como la lectura en las vísceras de los animales, los espejos mágicos y la hechicería con alfileres clavados en figuras de cera.
Los autores del siglo XIX son los principales responsables de esta leyenda, empezando por Honoré de Balzac con La confidencia de los Ruggieri y El secreto de los Ruggieri. Estas novelas históricas, extraídas de los “estudios filosóficos” en los que se ocupa de Catalina de Médici, son el punto de partida de una numerosa y variada literatura que dará forma al mito Ruggieri, y que le atribuye al astrólogo un padre “Ruggieri el Viejo” y un hermano “Laurent”, aunque la existencia de estos personajes no está indiscutiblemente probada.
Gabriel-Louis Pringué, escritor y amigo íntimo de la familia de Broglie, reside asiduamente en Chaumont. En su obra Trente ans de dîners en ville (Treinta años de cenas en la ciudad) escribe: “Intenté sorprender a la zarabanda de fantasmas y espectros que salían de las escaleras secretas. Ruggieri elaboró allí sus pócimas de las que quedaban todavía los frascos encerrados en su estancia, mientras leía en los astros el futuro de Francia.”
Maqueta del ala este y de la capilla
Esta maqueta, compuesta por cinco piezas de yeso pintado, la realizaron en 1878, por encargo del príncipe Enrique Amadeo de Broglie, el arquitecto Paul-Ernest Sanson y el escultor Antoine Margotin, que también es el creador de la chimenea neogótica del Comedor.
El príncipe de Broglie acudía en contadas ocasiones a Chaumont para supervisar los trabajos de restauración. Esta maqueta, enviada al palacete de los Broglie situado en París, en el n.°10 de la rue de Solférino, le permitió al príncipe aceptar o rechazar las propuestas arquitectónicas de Paul-Ernest Sanson.
Sanson proyectó restaurar las galerías cubiertas de las fachadas oeste y este de la segunda planta con una decoración de caracolas inspirada retrospectivamente en las cornisas del ala Francisco I en Blois y en otros edificios regionales (en Beaugency, Orléans, etc.). También proyectó restaurar las lucernas y eliminar la cresta cumbrera de la capilla.